"No sabes las ganas que tengo de llamarte por telefono, te necesito tanto que
ya no se hacer con mi cuerpo, es mas, voy a ver si te llamo a las 11 y media
manana porque me urge oirte, como dices, sacarte de quicio, hacerte reir con
mis bromas machistas, sentirte de una manera loca, cerca de mi, a pesar de
todo, te siento aqui a mi lado, disculpame que lo diga pero se que eres mi
angel, estas cuidandome de todo, y tu imagen me infudira el coraje que
necesito en estas horas bajas de mi vida....!"


Esas palabras todavía las tengo escritas en mi correo, todavía quiero hacerme a la idea que tu sigues como en ese tiempo con respecto a mi, que me amas y que tienes la convicción que soy tu ángel.

Hoy quería borrar todo lo que me recuerda a ti, pero no puedo, simplemente no puedo. He decidido respetar tu vida, pero como dice Edinita Nazario, "Y cuando lejos, muy lejos estes, te recordare con tristeza en tu mirada".

Recién ahora entiendo que tus sentimientos cambiaron y lo único que me queda es guardar tu recuerdo y el amor que me tuviste algún día. Aunque yo no deje de pensar en tí.

Antes pensabas que "definitivamente tienes ojos de angel, mi angel privado, y lo recalco, MIS ojos de angel... siento que me ves con ellos, siempre estaras con ellos abrazandome, yo creo en loque estoy sintiendo, el amor es devoto con los que creen que la ultima danza que bailas es con la verdad....". Se te olvido y ahora lo único que genero en tí es que te mueras de las iras y que te hartes.